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Yo amo, Japan

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lunes, 9 de abril de 2018

Hello world, goodbye memories







Hace años tomé la decisión, quizás no del todo racional, no del todo entendible. Peor aún, sabiendo que esto en algún momento de mi vida me dio todo. Me tomé el tiempo de la vida cibernética. Escribí muchas de las cosas en mi cuaderno, algo más clásico. Lo necesitaba. Crecí, viajé, arriesgué y me independicé. No sé qué sucedió conmigo, pero me descubrí. Que encantador suena decirlo, después de varios años. Nunca desaparecí, nunca cerré nada que algún día me dio algo de dinero y mucha paz interior, pero creo que mi alma, mi mente y corazón no podía. Arreglé muchas cosas que andaban mal conmigo. Conocí la ciclotímica, encontré algo de paz, guerra y un término medio. Sucedieron tantas cosas a mi alrededor, conmigo y sin mí. Todo dolió demasiado como para pensarlo dos veces, heridas de la gente de mi alrededor y las de mi misma que decidí cerrar y algunas llevarlo con orgullo. Porque con cicatrices también se crece y se regenera. Encontré formas de volver a ser clown de todo, me hizo crecer como público o al menos así lo creí, aunque debo confesar que hubo momento que ni yo me la creí.

No, no he huido. ¿O sí?
No sé a qué le temo, sinceramente hoy en día la gente estúpida no me asusta, me da lástima: son tan hipócritas e ignorantes que van a vivir su estúpida vida dentro de una burbuja, fingiendo que todo está más que bien. Sí, es lindo, fácil y económico mentirse.
Mentimos todo el tiempo, nos encerramos en una atmósfera sin aire esperando asfixiarnos con nuestra propia hipocresía. Somos muy mierda, nosotros los humanos. A veces me gustaría ser un ovni así me reiría de todos los idiotas humanos que solo tienen cabeza para lo que les conviene. Sin embargo, al día de hoy me doy la oportunidad de volver a escribir y no ocultarme en el intento de 'caer bien a la gente´ .


Hello world, goodbye memories.