¿Bienestar?, ¿Qué es eso? Yo no sé de las cosas buenas, y siento
una terrible pena por mí misma. Por no decir lástima porque me suena más
culposo.
Lo peor de todo es que no puedo huír, ¡No puedo!, ¿No es eso triste?
Tengo que enfrentarme conmigo misma pero aún no estoy preparada. Bueno, me pregunto si es que alguna vez se lo está.
No
me importan los consuelos, no estoy buscando eso (¿Qué busco, entonces?
Quizás una excusa para abandonarme a la nada, y dejar que esta vida
termine de destruírse por sí misma)
Pero también sé que no
podría matarme (Tiene que ser algo externo que lo haga, ¡Sáquenme de
este dolor!) porque no estoy dispuesta a renunciar a la esperanza. Sí,
soy muy contradictoria. La vida lo es. O bueno no, quizás sea tan solo
yo.
Mi fantasía más triste se volvió realidad: El mundo
externo va transformándose en un gris pálido, degradándose. Sin embargo
una parte mía piensa que todo ello es bello, el dolor es bello en cierto
punto. O quizás es que me acostumbré tanto al dolor que me obligué en
cierto modo a pensar que es lindo. Pero mi vida no es linda.
Todo es triste, todo es triste, todo es triste (yo soy sola), todo es triste, yo soy sola, todo es triste, todo es triste.