No me arrepiento de cuanto te he querido. No pienso arrepentirme porque te quise lo más que pude, como yo sabía querer, a mi manera.
Soy humana y cometo errores, lo admito. Y tú, fuiste el error más bonito que pude cometer ( aunque siempre para mi serás la opción más acertada ) .
Lo siento, no pude dar más, porque por mi parte lo di todo. Y si no funcionó es porque quizás no tenia que funcionar. O quizás si pero no era el momento. Pero si en algún futuro nos volvamos a encontrar, más heridos, más mayores pero más sabios y con más ganas de comernos el mundo y de nuevo a nosotros nos encontraremos.
Porque no tengo malas palabras para ti, porque durante mucho tiempo fuiste lo mejor para mi.
No quiero engañarme a mi misma, diciendo que nunca mas volveré a enamorarme porque quiero. Quiero seguir aprendiendo de la vida, de mi. Darle a alguien de nuevo un trozito de mi corazón para que alguien más lo coja, alguien que lo merezca y comparta las ganas desaforadas de caminar a media noche, comernos a besos como un día lo hiciste tú.
Me creaste las mejores heridas que he tenido, sí; pero me enseñaste a saber amar, que aún estando en el suelo se puede subir al cielo. Cogiste de mi mano, cuando todo el mundo me había soltado y fuiste refugio, salvavidas, paz y hogar.
Me cuidaste de mis monstrous cada noche para que me dejasen tranquila y pudiese dormir en paz.
Lo escribo porque ya no quiero echarme la culpa de toda las cosas que hice mal. Porque aunque se que tú esto nunca lo leerás, te doy las gracias. Ya no quiero verme caída sino tomarlo como un aprendizaje y tú. Tú fuiste el mejor libro de autoayuda que nadie pudo ni podrá leerlo.