
Hoy ha sido el cumpleaños de una de esas personas que, casi sin darte cuenta, se hacen con un hueco en tu vida y forman parte esencial de ella. Sebastián es un buen amigo, de los mejores diría yo y al que quiero un montón. Sí, de esos que cuentas con los dedos de la mano y te sobran dedos, de los de verdad. Y eso que tampoco hace demasiado que nos conocemos. Si no recuerdo mal, todo comenzó en ese maravilloso, mítico y genial canal de chat, como recordar. Era lo tan opuesto a mí, que nunca pensé que ahora sea parte fundamental de mi vida. Eres de esas personas que hablando aprendes que puedes llegar aún más lejos de donde piensas que ya no puedes más. Que hay gente que te quiere mucho pero que no sabe como mostrártelo o que una amistad verdadera continua creciendo aún en medio de una gran distancia o que no importa qué bueno es un amigo puede herirte de vez en cuando y debes perdonarlo por eso. Hoy, me sacas una sonrisa. Hoy, me sigues demostrando que eres diferente. Porque con él puedo hablar desde cumbia, hasta los más triste y alegre que puede ser la vida, y entiende todo con claridad. Como recordar el año pasado, nuestras conversaciones “indirectas tan directas”. Y mira qué una especie rara como él pocos encuentran por estos medios, gracias, nunca me cansaría por todo. Y ya sabes qué cuentas con todo de mí parte, porque tienes acá un hombre una chica que no será la más genial. Pero de lo poco, poco hay. Bueno el caso que este servidora que está aquí le tiene mucho aprecio al Sebá y humildemente desde este rincón de mi corazón abierto al mundo, le quiero agradecer todos esos buenos y malos momentos que hemos pasado, los que estamos pasando y los que vendrán… porque aquí hay amistad para rato. Ya sabe, que aunque tenga 50 años, vamos a ir a carretear =D .
¿Acaso olvidaste de la foto ?
Feliz cumpleaños.