Ya no puedo seguir ocultándolo… no puedo seguir negándolo…
Fue difícil estar todo el tiempo junto a ti… sin que supieras lo que realmente sentía… no se que dirás… o que pensarás… quizás te rías y pienses que soy tonta… quizás no… pero se que te amo… no me importa tener que quedarme en la oscuridad… no me importa no ver el sol otra vez… me importas tú. Quisiera quedarme a tu lado todo el tiempo del mundo y amarte… amarte como nadie nunca te amó… quizás pienses que estoy loca… lo estoy… por ti lo estoy.
Te amo… quisiera darte mi sangre, mi vida… pero tú te niegas. ¿Por qué? ¿Te gusto así? ¿Humana? ¿O es porque tu moral no te lo permite?... pero… eres un vampiro… hazme inmortal para pasar el resto de la eternidad contigo…
¿Pero por que dices que no se lo que estoy diciendo? Se perfectamente lo que estoy diciendo… te amo… y quiero estar contigo… ¿es tan difícil de entender?
Por favor escúchame… no… ¡no! ¡Mi vida no es nada sin ti! Te amo… no sabes cuantas noches me he dormido llorando por ti… no me queda nada… solo tú… y todo lo que hiciste por mí… tú llenaste mi vida de esperanza… esperanza que ya no me quedaba…
Ahora dices que tú sólo me quieres… ¿Sólo me quieres? No me digas que… ¿Tienes a alguien más? No me hagas esto… no… por favor no… ¡No!
Me abrazas. ¿Por qué te disculpas?... ¿Por hacerme llorar? Yo sólo me aferro a ti y no digo nada. Me gusta sentir tu olor, tu respiración, tu calor… cada segundo me enamoro más de ti...
Te beso… te dejas llevar… este momento… es tan perfecto… solos tú y yo… ¿Quién era la otra? De seguro que ya ni te acuerdas de su nombre. Te amo… lo susurro despacio, para que nadie más lo escuche… solo tú… tú… la única persona en mi corazón… tú… mi vampiro…
Cuando desperté, el sol todavía no salía. En medio de tu sueño, buscaste mi cuerpo desnudo, guiándote por la fragancia de mi piel que quedaba en las sabanas. Cuando me encontraste, abriste los ojos y me rodeaste con tus brazos. Mi piel desconoce el frío cuando estoy a tu lado. Acercaste tus labios a mi oído, casi rozando mi piel y susurraste: - Eres hermosa… - sentí mi piel erizándose y me aferré aun más a ti. – Que noche tan perfecta… - dijiste – Solos tu y yo, la oscuridad, las estrellas, la pasión, el amor… ¿no crees? –
- ¿Me amas? – pregunté tímida
Me miraste a los ojos y me respondiste con tu mirada.
- Creí que solo me querías… - dije
- No… me equivoqué… -
Me besaste en los labios tiernamente. – Te amo… - susurraste. ¿Me amas? ¿De veras me amas? Espero que no sea un sueño… no… no fue un sueño… fue verdad.
El sol empezó a filtrarse entre las cortinas. Te levantaste de la cama y pude apreciar tu hermoso cuerpo mientras te ponías los pantalones. Me levanté y me puse tu camisa. Te acercaste a mí y me besaste los labios, mis manos viajaron por tu espalda, acariciando cada detalle del tatuaje que la cubría. Entonces tus labios llegaron a mi cuello y te quedaste ahí por varios minutos. - ¿Qué esperas? – pregunté impaciente. Tus manos apretaron mis brazos fuertemente, mientras te alejabas de mi cuello para mirarme la cara. – No puedo hacerlo… - dijiste. – Te amo demasiado como para hacerte esto… -
Entonces, tu mirada cambió radicalmente… y supe que algo andaba mal. Todo fue demasiado rápido. No alcanzaste a decir nada y ellos ya habían entrado a nuestra habitación. Me abrazaste para protegerme, yo me aferré a ti mientras las lágrimas se escapaban de mis ojos. – ¡Déjala ir, maldita bestia! – te gritó uno de ellos. Gruñiste amenazante, pero ellos no parecían comprender nuestro amor. - ¡Que la dejes ir! – pero esta vez, el idiota alzó un revolver con balas de plata… y disparó.
Pude escuchar tu voz diciendo “te amo” por última vez y cenizas cubrieron mi cuerpo. Grité. Grité porque te había perdido para siempre… mi hermoso vampiro…
Voltee para encarar a los malditos cazadores. No pude soportar el dolor, la pena, la desesperación. Los maté. Los maté a todos con mis propias manos. Se que te hubiera gustado ver ese espectáculo de sangre… pero… me recosté al lado de tus cenizas y lloré. Nada en el mundo iba a poder reemplazarte. Te habías ido y no ibas a volver. No podía aceptar el hecho de vivir sin ti. Tomé el revolver ensangrentado y lo puse contra mi sien. – Te amo… - dije. Jalé el gatillo… y todo fue oscuridad.
" Te amo, mi vampiro " .
Gracias Javier por pasarmé ya se que ni leeras esto, o tal vez sí, pero muchas gracias n.n ♡
